9na Sinfonía en re menor Op.125 de Ludwig van Beethoven 

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La Novena sinfonía en re menor, opus 125, es la última sinfonía completa de Ludwig van Beethoven (Bonn, 1770 - Viena, 1827), compuesta por encargo de la Sociedad Filarmónica de Londres en 1817 y estrenada el 7 de mayo de 1824, en el Kärntnertortheater de Viena. Beethoven compuso su novena sinfonía estando cerca de la sordera total, aquejado por las enfermedades y tras años alejado de la sociedad, lo que, dada la belleza y el mensaje esperanzador de la obra, representa lo más alto del espíritu y el potencial humano.

 

La obra consta de 4 movimientos, siendo el último y más famoso, sobre el poema de Friedrich Schiller "An die Freude" ("A la alegría"). Este último movimiento es acompañado por coro sinfónico y solistas líricos, siendo las palabras iniciales, del propio Beethoven, "¡Amigos!, ¡esos tonos no!. ¡Entonemos otros más agradables y llenos de alegría!". Así es como "La Novena" entrega al mundo entero un mensaje de fraternidad, igualdad y libertad, dignos estandartes del período revolucionario y humanista en el que vivió, y tan necesarios hoy.

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TEXTO EN ESPAÑOL

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-Barítono-

¡Oh amigos, esos tonos no!

Entonemos otros más agradables y

llenos de alegría.

¡Alegría, alegría!

 

-Barítono y coro-

¡Alegría, bella chispa divina,

hija del Elíseo!

¡Penetramos ardientes de embriaguez,

¡Oh celeste, en tu santuario!

Tus encantos atan los lazos

que la costumbre rompió rígidamente;

Y todos los hombres serán hermanos

bajo tus alas gentiles.

 

-Solistas y coro-

Quien logró el golpe de suerte,

de ser el amigo de un amigo.

Quien ha conquistado una noble mujer

¡Que una su júbilo al nuestro!

¡Sí! que venga aquel que en la Tierra

pueda llamar suya siquiera un alma.

Pero quien jamás ha podido,

¡que se aparte llorando de nuestro grupo!

 

Todos los seres beben alegremente

de los senos de la Naturaleza.

Todos los buenos, todos los malos,

siguen su camino de rosas.

Ella nos dio los besos y la vid,

y un amigo probado hasta la muerte;

Al gusanillo fue dada la lujuria

y el querubín está de pie ante Dios.

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-Tenor y coro masculino-

Alegres como vuelan sus soles,

A través de la espléndida bóveda celeste,

Corred, hermanos, seguid vuestra ruta

Alegres, como el héroe hacia la victoria.

 

-Coro-

¡Alegría, bella chispa divina,

hija del Elíseo!

¡Penetramos ardientes de embriaguez,

¡Oh celeste, en tu santuario!

Tus encantos atan los lazos

que la costumbre rompió rígidamente;

Y todos los hombres serán hermanos

bajo tus alas gentiles.

 

¡Sean abrazados Millones!

¡Este beso al mundo entero!

Hermanos, sobre la bóveda estrellada

Debe habitar un Padre amante.

 

¿Os arrodilláis, Millones de seres?

¿Mundo, presientes al Creador?

Búscalo por encima de las estrellas!

¡Allí debe estar su morada!

 

-Solistas y coro-

¡Alegría, bella chispa divina,

hija del Elíseo!

¡Penetramos ardientes de embriaguez,

¡Oh celeste, en tu santuario!

Tus encantos atan los lazos

que la rígida moda rompiera;

y todos los hombres serán hermanos

bajo tus alas bienhechoras.

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